domingo, 19 de junio de 2016

Múltiplos de cinco en mi vida

O es cinco
O es diez
O es veinte, veinticinco, cincuenta.
Nunca números primos.
Los seres humanos tendemos a la simplicidad.
Los múltiplos de cinco se me aparecieron a los veintiuno: recordé que hacia una década que usaba anteojos.
Otros múltiplos escaparon de mi memoria, aparentemente estaba muy distraído cuando se cumplieron diez y después veinte años de mi graduación en la Universidad. Pero recordé que este año se cumplen veinticinco de mi primer artículo científico publicado.
Y los múltiplos de cinco siguieron y siguen acumulándose.
Para mis cinco décadas llegó un premio por mi trabajo. Y no hubo logro mejor que sentir el orgullo de mi hija entrando con el premio a la escuela.
Ella cumplió diez años hace poco.
Y hoy (día 19, 1+9= 10) se cumple una década de cuando llegó a nosotros con su ropita amarilla. Justo hoy que en la Argentina se festeja el día del padre.
Tenía cinco días.
Y el universo de los múltiplos de cinco me persigue, obsesivo.
Porque yo nací un día cinco.
Y hace diez años una niña de cinco días me hizo nacer a la vida que vale la pena, la vida buena como dice ella.
Y no puedo evitar de pensar que las estrellas, incluyendo las estrellas azules, las dibujamos con cinco puntas.
Por suerte esto recién empieza.
Mañana es mejor”, decía el poeta.
Brindo por eso, por los múltiplos de cinco que nos esperan, ansiosos por sorprendernos una y otra vez, fulgores de la niña de la estrella azul.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario