martes, 21 de febrero de 2017

Aprendiendo a escribir manuscritos científicos en cinco pasos

Es sabido que en el mundo de hoy sufrimos de infotoxicación. Este grave problema, ya mencionado por el gran Hernán Casciari (http://editorialorsai.com/blog/), se ha solucionado con la confección de listas, guías prácticas y ordenadas que facilitan la vida de los mortales. Podemos encontrar listas de las más variadas: como elegir zapatillas para correr, como cocinar el arroz sin tanto arsénico, qué protector solar usar de acuerdo a color de nuestra piel… hay infinitos ejemplos.
Vengo hoy a hacer mi humilde aporte: una lista de cómo desarrollar la aptitud de escribir manuscritos científicos en forma clara y concisa, en apenas cinco pasos:

Paso 1. Lea el siguiente párrafo: “Salió de la furgoneta para ver cuántos otros proveedores tenía a su frente para así poder calcular, con mayor o menor aproximación, el tiempo que tendría que esperar. Era el número trece. Contó nuevamente, no había dudas. Aunque no era una persona supersticiosa, no ignoraba la mala reputación de este número, en cualquier conversación sobre el azar, la fatalidad y el destino siempre alguien toma la palabra para relatar experiencias vividas de la influencia negativa, y a veces funesta, del trece. Tentó recordar si en otra ocasión había tenido ese lugar en la fila pero una de dos, o nunca esto había ocurrido o simplemente no se acordaba”.

Paso 2. Lea el siguiente párrafo: “Me iba bien en el trabajo. Era lo mismo todos los veranos. El calor y la niebla tóxica llegaban a cubrir el valle; la gente sucumbía bajo el calor y la apatía; las resoluciones y los compromisos quedaban sin resolver. Yo me aprovechaba de la situación: mi mesa estaba llena de órdenes de recuperación de coches de todas las marcas y modelos…Sentado en mi despacho, escuchando el concierto para violín de Beethoven y tomando mi tercera taza de café, calculaba mis ganancias y descontaba mis gastos”.

Paso 3. Evite escribir un manuscrito científico en el estilo que el señor José Saramago usó en el trecho del libro “La caverna”, reproducido en el Paso 1.

Paso 4. Intente adoptar el estilo directo al punto tal como el señor James Ellroy lo hace en el trecho del libro “Réquiem por Brown”, reproducido en el Paso 2.

Paso 5. Evite que un sentimiento de corrección cultural le impida realizar el Paso 4. Editores y revisores de revistas científicas se lo agradecerán. Y, quien sabe, tal vez su manuscrito tenga más chances de transformarse en un artículo publicado.